bitacorARP

Los vampiros ¡vaya timo!

Los vampiros ¡vaya timo!
Jordi Ardanuy,
144 páginas
ISBN: 978-84-92422-08-1
13,00 euros.

           El mito de los vampiros “goza de buena salud”,  sea en películas, libros, juegos, series o sencillamente como manía, forma de vida o de vestir no pasa de moda. Sólo hay que pasarse por la sección de novedades literarias de cualquier librería y ahí estarán dando la lata los Crepúsculo y Anne Rice, ver las carteleras o las novedades en DVD o echar un vistazo a las propuestas para adolescentes. Tampoco es nada de otro mundo ni nada que deba preocupar, “No seas ingenuo, escribe el autor de este libro a un joven amigo. Diferencia la realidad de la ficción. Si te gusta la estética de los neovampiros, perfecto: lee, ve películas, baila, reúnete con otros simpatizantes. Diviértete pensando en ellos. Escribe relatos, compón poemas o canciones. Pero rechaza a quienes se aprovechan de tus ganas de creer.”

            En efecto, el libro no explica con claridad los motivos por los que ningún no muerto – por definición ni está “no muerto” es que está “sí vivo” – va a venir volando a nuestra habitación, esperando que le invitemos a entrar – si no lo hacemos se quedará flotando ante la ventana con cara de tonto– para chuparnos la sangre y, si tenemos suerte, pedirnos sexo – los vampiros de la última mitad del siglo XX y principios del XXI han decidido ser más interesantes que sus compañeros más viejos y tener una considerable actividad sexual -. Aunque igual tenemos menos suerte y lo que nos ataca no es un vampiro tradicional y se trata de un “vampiro psíquico” dispuesto a robarnos nuestra energía, ¡pues tranquilos! Porque tampoco esos existen.

 Nadie vive para siempre, nadie puede volar llevando una capa y siendo muy pálido y, nadie, bebe sangre para vivir ni se alimenta de la energía mental de los demás. Nunca ha habido vampiros, ni nunca los habrá – sí ha habido gente vestida de vampiro o que se cree vampiro, pero eso es otra cosa -. Da igual lo que los libros, al uso, cuenten, o nos digan los “expertos”, mientras que el fenómeno del vampirismo – la creencia en los vampiros – es algo real –, ahí está el rentable negocio alrededor de los “no muertos” – y la historia para atestiguarlo. Los vampiros como seres reales no han existido nunca. Incluso los intentos de explicación científica que daban por sentado que estos habían existido y no eran más que malas interpretaciones de enfermedades como la rabia, la porfiria o la fotofobia se han topado con el hecho de que no explican absolutamente nada porque… sencillamente no hay nada que explicar, se trata de un mito, una leyenda, un fenómeno cultural no hay vampiros y, así lo demuestra el autor del libro.